💖 Nuevos sabores - Norma, 29 años 💖

Desde ya casi 3 años que estamos casados mi esposo y yo más 2 años de noviazgo y que nos conocemos. Realmente desde el principio de la relación la comunicación entre nosotros ha sido constante y siempre hemos sido sinceros el uno con el otro casi en todo. Digo casi en todo porque a veces pienso que él como hombre quizá guarde algunos temas para si mismo, y de ser así debo decir que también he guardado un tema en particular que no he tenido el atrevimiento de platicar con él, principalmente por pena y un poco de miedo. Considero que somos una pareja normal, tan común y corriente como cualquier otra con todo y sus problemas ocasionales, salimos a pasear, a hacer compras, él sale con sus amigos, yo con los míos, tenemos sexo algunas veces por semana para levantar el ánimo en un mal día o cerrar con broche de oro una gran jornada o por el simple hecho de desearlo, justo como hoy.

Hace apenas unos minutos que terminamos de tener relaciones y ha sido tan rico y placentero como cada vez que lo hacemos. Pero hay una parte de mi que no se siente completamente satisfecha, no hablo de algo que me haga falta físicamente pues los 2 orgasmos que acabo de tener fueron estupendos, sino que es una especie de deseo emocional el que surge en mi mente. 

Escucho a mi esposo en la ducha y pienso en él y en lo mucho que lo amo, pero ese mismo amor es el que impide que le platique sobre otros deseos que tengo.

No me gusta la idea de pensar que al platicarle lo que siento puedo perderlo si no le agrada lo que quiero decirle, sería algo de lo que me arrepentiría toda la vida aunque sé que quizá no sería culpa mía, así que por ahora prefiero seguir guardando ese sentir, quizá más adelante se de la ocasión o el momento justo.

Empecé mi relación con él desde muy jovencita, apenas estaba por llegar a la mayoría de edad y realmente no me arrepiento, es un gran hombre, pero al mismo tiempo siento que quizá me hizo falta disfrutar un poco más mi soltería, vivir la vida loca como algunos dicen.

Para ser honesta, me encantaría haber tenido más parejas sexuales, explorar nuevas formas de tener sexo y cumplir algunas fantasías, porque creo que también las mujeres tenemos libertad de hacerlo. A veces me pregunto qué se sentirá hacerlo con otra chica, llama mucho mi atención el tocar el cuerpo desnudo de otra mujer, sentir su piel e incluso besar sus senos o hacerle sexo oral pero que tuviera su vagina depilada, creo.

Otra de mis fantasías es probar los tríos, imagino que cada uno de ellos se siente muy diferente. En el caso del trío "mhm" supongo que el placer se encuentra en disfrutar lo mejor de ambos sexos, la intensidad con la que puede hacerlo un hombre y la delicadeza de las caricias de una mujer. En el trio "hmh" me gusta pensar en la adrenalina de tener dos hombres para mí solita y ¿Por qué no? probar la doble penetración. En un trío "mmm" no sé qué pensar hasta que pueda estar con una mujer a solas. Dicen que hacerlo con una mujer es muy rico pues sabrá tocarte mejor que un hombre y puedo decir que es una las fantasías que más se me antoja.

Tan solo de pensar en esto y otras ideas más que se me ocurren me vuelvo a exitar y pienso si me atrevería a hacer cada una de ellas. Aprovecho que me queda aún un poco de energía y me masturbo unos minutos, y la primera de todas mis fantasías en llegar a mi mente para inspirarme es la de estar con otra mujer.

Imagino que en el fondo es la que más deseo por ahora y quizá hacerla en la habitación de un hotel para tener toda la tranquilidad y discreción posible para disfrutarlo al máximo. Me estoy tocando discretamente por si mi esposo sale de la ducha y pueda disimular rápidamente, preferiría evitar cualquier cuestionamiento de su parte por ahora.

¿Y si lo hago a sus espaldas? Tal vez hacerlo solo con otra mujer no cuente tanto como infidelidad, es un riesgo que puedo correr...